Estas vacaciones están siendo de lo más relajantes, casi ya no he estado tanto tiempo en línea y aun faltan dos semanas y media para que terminen. He recorrido las calles que recorrí durante mi infancia y me he asombrado con los cambios. Sin embargo la funeraria sigue igual, no tendría porque cambiar tanto, la muerte sigue siendo estática.
Afortunadamente los mosquitos no me han atacado mucho como en anteriores ocasiones, es lo malo de tener la sangre ligerita, ligerita, ligerita.
Hace rato fuí contra mi voluntad a ver la película "El Infierno" y debo decir que está interesante y buena, ampliamente recomendable. Yo ya quiero que salga Volver al Futuro, fue una de esas películas que de niño me hicieron pasar horas y horas encerrado en mi recámara, viendo hacia el techo, imaginando todo lo que yo podría haber hecho con un DeLorean capaz de viajar por el tiempo.
¿Quien no ha querido regresar en el tiempo y rehacer las cosas de una mejor manera? Aprovechando la experiencia que hemos acumulado. ¿O incluso averiguar cual será el número ganador de Melate y volverse millonario?
De niño me preguntaban muy frecuentemente en que época de la historia me hubiera gustado vivir. Esa pregunta nunca tuvo sentido para mí, hasta apenas recientemente. Anteriormente yo prefería ir al futuro, así disfrutaría de los avances tecnológicos, de las comodidades ultramodernas, y quizás de una sociedad más abierta que aceptara a los y las homosexuales sin ningún problema.
Utopías tontas que al final poco a poco se convierten en una realidad maltrecha. no niego que actualmente la sociedad muestre una aceptación hacia personas con gustos diferentes, pero aun así no es el ideal que todo mundo esperaría de un futuro perfecto. Y con todo el mundo, me refiero a los gays.
Aun así yo no me puedo quejar de haber sido maltratado por la sociedad, todos mis amigos me quieren y me aceptan tal cual. Nunca me han gritado o insultado o nada de eso.
Supongo que es una de las ventajas de tener la sangre ligerita, ligerita, ligerita.
Afortunadamente los mosquitos no me han atacado mucho como en anteriores ocasiones, es lo malo de tener la sangre ligerita, ligerita, ligerita.
Hace rato fuí contra mi voluntad a ver la película "El Infierno" y debo decir que está interesante y buena, ampliamente recomendable. Yo ya quiero que salga Volver al Futuro, fue una de esas películas que de niño me hicieron pasar horas y horas encerrado en mi recámara, viendo hacia el techo, imaginando todo lo que yo podría haber hecho con un DeLorean capaz de viajar por el tiempo.
¿Quien no ha querido regresar en el tiempo y rehacer las cosas de una mejor manera? Aprovechando la experiencia que hemos acumulado. ¿O incluso averiguar cual será el número ganador de Melate y volverse millonario?
De niño me preguntaban muy frecuentemente en que época de la historia me hubiera gustado vivir. Esa pregunta nunca tuvo sentido para mí, hasta apenas recientemente. Anteriormente yo prefería ir al futuro, así disfrutaría de los avances tecnológicos, de las comodidades ultramodernas, y quizás de una sociedad más abierta que aceptara a los y las homosexuales sin ningún problema.
Utopías tontas que al final poco a poco se convierten en una realidad maltrecha. no niego que actualmente la sociedad muestre una aceptación hacia personas con gustos diferentes, pero aun así no es el ideal que todo mundo esperaría de un futuro perfecto. Y con todo el mundo, me refiero a los gays.
Aun así yo no me puedo quejar de haber sido maltratado por la sociedad, todos mis amigos me quieren y me aceptan tal cual. Nunca me han gritado o insultado o nada de eso.
Supongo que es una de las ventajas de tener la sangre ligerita, ligerita, ligerita.